Por Víctor Hugo Majano/ Cuatro F
El conglomerado de alimentos Polar aumentó en alrededor del 100% al menos dos de sus productos de consumo masivo durante la ultima semana, según se pudo confirmar durante un recorrido por varios supermercados.
La salsa de tomate tipo ketchup, marca Pampero, de 397 gramos, fabricada por la corporación, se comenzó a ofrecer en un precio de 160 bolívares, es decir un 127% más con respecto a su precio anterior que se ubicaba en 71 bolívares.
El producto desapareció durante unos quince días para reaparecer con ese nuevo precio que, incluso duplica el valor de las marcas de la competencia, que lo ofrecen en 78 bolívares.
Vale destacar que la diferencia de precios de los productos de Polar y los similares de otras marcas está en el orden de un 50% aproximadamente. Eso ocurre con el arroz en versiones no reguladas, como el perlado o el saborizado, que lo ofrecen en 120 bolívares mientras los de otros distribuidores se venden entre 83 y 92 bolívares.
Asimismo, la bebida láctea Migurt se comenzó a ofrecer a 615 bolívares. Su precio anterior era de 320 bolívares, lo que representa un incremento del 97%. Lo mas contradictorio es que el producto se podía localizar con los dos precios en distintos supermercados.
Otros rubros, como la mayonesa marca Mavesa, en su presentación de 910 gramos pasó de 344 a 380 bolívares en una semana.
El jefe de las empresas Polar, Lorenzo Mendoza, se encuentra inmerso en un escándalo, luego de que se revelara una conversación telefónica con un exministro y académico de la Universidad de Harvard, Ricardo Hausmann, planificando un plan de ajuste macroeconómico apuntalado por el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Compra participación en MiGurt
Compra participación en MiGurt
Mientras en Caracas los trabajadores de la planta de Migurt, un producto de origen lácteo que comercializan como yogurt, presionaban al gobierno para que entregara divisas destinadas a comprar materia prima, en Madrid se registraban los documentos que finiquitaban la compra, por parte de Empresas Polar, de la totalidad de las acciones de la sociedad iniciada en 2012 con el conglomerado empresarial español Pascual.
Según se puede verificar en el Boletín Oficial del Registro Mercantil de España (Borme) el 1º de octubre pasado se publicó el cambio de denominación social de la empresa Pascual Andina Holdings por el de Migurt Andina Holdings, igual al nombre comercial usado en Venezuela.
El cambio de nombre había sido inscrito el 22 de septiembre de 2015 y quedó asentado con estos datos: T 28146, F 34, S 8, H M 507033, I/A 10. Ese mismo día también fueron modificados dos artículos de los estatutos de la empresa y se reeligieron los miembros del Consejo de Administración, presidido por Lorenzo Mendoza Giménez.
En la estructura directiva figuran los ejecutivos de Polar: Pablo Baraybar, Guillermo Bolinaga, Manuel Larrazábal y Rafael Sucre, y solo se mantiene como consejero Tomás Pascual Gómez-Cuetara, jefe de las empresas Pascual. En junio de 2014 habían cesado en sus funciones dos consejeros de Pascual, por lo que es probable que desde ese fecha ya había sido pactado el traspaso del negocio.
Una semana antes, es decir el 15 de septiembre, se registró la declaratoria de unipersonalidad, esto es el procedimiento por el cual “la titularidad jurídico-formal de las acciones o participaciones de la sociedad recaen sobre una persona, sea natural o jurídica”. Ese acto convirtió a la sociedad Poba Foods Holdings en el único socio de Pascual Andina Holdings.
Poba Foods (denominada anteriormente Poba Venezuela) es propiedad a su vez de una firma de Nueva Zelanda, Poba (NZ) Trutee Co Limited, creada en 2009 por un escritorio jurídico y adquirida por Polar en julio de 2012. Sus directivos son Juan Lorenzo Mendoza Pacheco (primo de Lorenzo Mendoza), Juan Simón Mendoza Giménez (hermano) y los funcionarios del conglomerado, Augusto Morales, Rafael Sucre y Guillermo Bolinaga.
La producción del derivado lácteo se inició en noviembre de 2012 a través de una alianza entre Alimentos Polar y el Grupo Leche Pascual de España, con una inversión de 629 millones de bolívares, equivalente a 146.3 millones de dólares.
Desde hace varias semanas voceros ligados a la planta han informado sobre una inminente paralización de la producción como consecuencia, supuestamente, de la falta de divisas para cancelar deudas a proveedores internacionales y reponer materia prima. Sin embargo, esa divulgada falta de divisas no impidió que Polar concretara la compra de la totalidad del negocio y dejara fuera al socio español, que se mantendrá con tareas de soporte e ingeniería.
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