Oficina de Comunicaciones
Carretera Panamericana, km. 11, Altos de Pipe.
Teléf. (0212) 504 11 74 / 13 93.
Cuenta en twitter: @ivic_oficial
Apdo. 20632, Fax: 504 14 26- Cód.
Postal, 1020- A.
Ministro Manuel Fernández visitó a esta institución científica
Se ha comprobado que el producto mejora la productividad en el
campo.
Altos de Pipe, 2 de junio de 2014 (Vanessa Ortiz Piñango).-
Con una producción anual de aproximadamente 800 kilogramos de
inoculantes micorrízicos, el Laboratorio de Ecología de Suelos del Instituto
Venezolano de Investigaciones Científicas (Ivic) es el único en el país que ha
empleado la asociación entre las plantas y ciertos hongos -denominada
micorriza- como fertilizante biológico para ser utilizado en la agricultura.
Durante una visita efectuada por sus instalaciones, el ministro
del Poder Popular para Ciencia, Tecnología e Innovación (Mppcti), Manuel
Fernández -acompañado del director del Ivic, Eloy Sira- constató el papel que
juegan las micorrizas en el aumento del crecimiento y biomasa de la flora, en
particular su aplicación en suelos ácidos y escasos de nutrientes como el
fósforo.
En ese sentido, manifestó su asombro al observar que las plantas
hospederas de los hongos micorrízicos arbusculares del filo Glomeromycota
eran más robustas y llamativas que aquellas crecidas en ausencia de micorrizas.
Asimismo, el titular del Mppcti recordó que entre los beneficios
reportados por esta simbiosis figuran la restauración de suelos degradados por
actividades humanas, el ahorro de fertilizantes químicos y la recuperación de
especies en peligro de extinción.
Ganar-ganar
La micorriza ocurre cuando las esporas del hongo micorrízico
arbuscular germinan produciendo filamentos (hifas) que entran en contacto con
la superficie de la raíz y la penetran. Una vez en el interior de la planta, se
generan estructuras del hongo dentro de las células de dicha planta,
fundamentalmente vesículas (órganos de reserva del hongo) y arbúsculos (lugares
donde se produce el intercambio). En este instante, la planta le transfiere al
hongo los carbohidratos procedentes de la fotosíntesis que este requiere para
su desarrollo y el hongo le proporciona a la planta nutrientes esenciales, como
fósforo y nitrógeno.
Sustituir el empleo de fertilizantes químicos en el cultivo de la
tierra por sustitutos orgánicos libres de tóxicos, ha sido una de las
estrategias adoptadas en diversos países del mundo para hacer de la agricultura
una práctica sostenible. De allí que las micorrizas constituyan una excelente
herramienta ecológica para mejorar la productividad de este sector de la
economía y, por consiguiente, garantizar la seguridad alimentaria.
Desde hace varios años, el Ivic ha estudiado los efectos benéficos
de las micorrizas arbusculares, logrando hasta la fecha la producción de
inoculantes de siete especies de hongos micorrízicos arbusculares gracias al
financiamiento del Programa BID-Fonacit II.
“La inoculación
de estos hongos en las plantas ha reducido a la mitad la dosis de fertilización
química requerida para alcanzar los niveles de producción usuales del cultivo
de yuca en condiciones de campo”, aseguró la investigadora del Laboratorio de
Ecología de Suelos del Ivic, Laurie Fajardo.
Retos
En la Facultad de Ciencias de la Universidad Central de Venezuela
(UCV) existe otro grupo de trabajo dedicado a estudiar las micorrizas,
específicamente los aspectos relacionados con la ecofisiología de esta
simbiosis. Sin embargo, el Ivic es pionero en Venezuela en la producción de
inoculantes, preció Fajardo.
Por su parte, la profesional asociada a la investigación del
Laboratorio de Ecología de Suelos del Ivic, Milagros Lovera, informó que
gracias al apoyo recibido por las autoridades del instituto fue posible crear
una unidad especializada en el desarrollo de inoculantes micorrízicos.
“Es un
reconocimiento al esfuerzo que a lo largo de todos estos años ha hecho nuestro
laboratorio para generar inoculantes que puedan ser usados como
biofertilizantes. La creación de esta unidad de servicio permitirá ampliar la
colección de cepas autóctonas de hongos micorrízicos a partir de las cuales se
producen los inoculantes, así como transferir la tecnología desarrollada para
su producción a instituciones agrícolas interesadas en producirlos a una mayor
escala” afirmó Lovera.
Adicionalmente, informó que en la actualidad el Ivic cuenta con un
herbario, inscrito en el Registro Nacional de Colecciones Biológicas del
Ministerio del Poder Popular para el Ambiente, conformado por 2.400 láminas de
referencia con información acerca de las distintas especies de hongos
micorrízicos arbusculares halladas en diversas regiones del país.
No hay comentarios:
Publicar un comentario