29 Ene 2020
Bien sabemos por informes, reportes, libros, e incluso a través de películas y series, del radio de influencia de las empresas de cabildeo en la toma de decisiones políticas el Congreso de los Estados Unidos y en la Casa Blanca.
Dichas firmas están consagradas en las leyes estadounidenses para mantener lazos efectivos entre corporaciones y agendas políticas, lo que confirma el dominio del interés privado sobre el público en cuanto a las decisiones de gobierno.
Aunque las agencias de lobby no sean exclusivas de Estados Unidos, es en ese país donde predomina como correa transmisora del poder corporativo. El que puede pagar sus servicios logra favores políticos en el seno de la legislación federal, logrando crear lazos de dependencia financiera entre políticos, funcionarios y medios de comunicación.
En América Latina, la influencia de dichas empresas pasa desapercibida debido a que generalmente se trazan agendas políticas según el interés privado bajo la mesa, bajo secreto, y casi siempre de manera no oficial, con estas firmas de intermediarios.
En 2009, tras el golpe de Estado contra Manuel Zelaya en Honduras, dio inicio a un proceso que contó con una compañía de este tipo a los servicios del gobierno interino que tomó las riendas del Estado (el Partido Nacional, el mismo clan político del actual mandatario Juan Orlando Hernández).
De igual manera pasa hoy en Bolivia, donde Jeanine Áñez ha buscado perpetuarse en el poder a través de la misma firma que proveyó sus servicios en el país centroamericano.
CLS STRATEGIES A SUS SERVICIOS, DON MICHELETTI
Se trata de CLS Strategies, que durante el gobierno interino de Roberto Micheletti en Honduras trazó el plan de maniobras para que el Partido Nacional pudiera consolidarse en esa posición.
Lee Fang, periodista del medio The Intercept, publicó un trabajo en el que develó la conexión entre CLS Strategies y los gobiernos interinos de Honduras y Bolivia. Ambos contextos, aunque distantes en el tiempo, se asimilan en la estrategia que cada gobierno parido del golpe ha venido tomando con el fin de fabricar una base de apoyo en escenarios electorales.
CLS Strategies es una empresa radicada en Washington, D.C., anteriormente conocida como Chlopak, Leonard, Schechter & Associates. Cuenta entre sus clientes no solo a grandes corporaciones como IBM, Hyundai, Monsanto, Hilton y ABC Television, sino también a la Fundación de la ONU y el Banco Mundial, así como algunos Estados: en su portafolio están Brasil, Colombia, Ecuador, Egipto, España, Kenia, México, Perú y pare usted de contar.
Fang cuenta en su reporte que el exsenador republicano Jim DeMint voló casi inmediatamente a Tegucigalpa, capital hondureña, luego del golpe como emisario del Congreso ante el gobierno interino. DeMint tenía profundas conexiones con CLS Strategies, siendo Juan Cortiñas (socio de la firma) parte de su staff legislativo y traductor personal al español del exsenador ante los golpistas.
Cortiñas es asesor de comunicaciones a gobiernos, corporaciones y líderes políticos. En su perfil la web de CLS dice fue consultor del expresidente colombiano Juan Manuel Santos, del candidato argentino Sergio Massa y además proveyó servicios a la oposición venezolana, aunque no da detalles del contexto en que ocurrió.
El enlace de DeMint y Cortiñas con el gobierno interino de Micheletti fue provechoso para este último, ya que a través de CLS Strategies se logró posicionar columnas de opinión en la prensa escrita y digital a favor del Partido Nacional en el contexto electoral, además de orientar a reporteros y corresponsales de grandes medios para dar una cobertura dirigida de los sucesos post-golpe a Zelaya y así promover la imagen del interinato.
El ambiente hondureño estuvo caldeado durante esos años 2009 y 2010. Micheletti suspendió derechos civiles vía estado de sitio oficial, aplastó con mano dura las protestas en contra del golpe y bloqueó la transmisión de varios medios de comunicación como Telesur, Radio Globo, incluso CNN.
Al mismo tiempo, y a través del Senado estadounidense, la firma fabricó el consentimiento a favor del gobierno interino hondureño en los Estados Unidos.
The Intercept relata una operación psicológica que fue llevada a cabo por Cortiñas contra el periodista David Romero, de Radio Globo, quien nunca dejó de mostrar simpatía por Zelaya y acusó a Israel y "los judíos" de estar detrás del golpe en 2009. CLS usó la táctica sionista de usar etiquetas de "antisemita" e intolerancia religiosa contra Romero para después usarlas como pretexto para cerrar Radio Globo y confiscar sus bienes.
La condena internacional sobre Micheletti se afianzó luego de que cerrara tajantemente este medio, pero CLS se encargó de usar las mismas etiquetas "antisemitas" para justificar la acción del gobierno interino, reenfocando la atención mediática sobre la retórica de David Romero.
Lo que sucedió después de las elecciones en Honduras la conocemos de sobra por los escándalos de corrupción y narcotráfico que rodean al partido de gobierno, el Partido Nacional, además de arreciar en la represión militar y policial contra las manifestaciones sociales en su contra, y que 11 años después se recrudece.
El actual presidente Hernández tiene a un hermano siendo procesado por narcotráfico en los Estados Unidos mientras hace las diligencias para perpetuarse en el poder por más años a través de reformas judiciales a dedo.
El Partido Nacional de Honduras consolidó el poder en el país. Desde entonces, se pierde de vista las tramas de corrupción y narcotráfico en la que están involucrados sus militantes, Juan Orlando Hernández a la cabeza.misionverdad.com/trama-global/e…
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Visto así, no es poca cosa lo que una firma de cabildeo es capaz de hacer en cualquier parte del mundo.
ÁÑEZ ATACA Y CONTRAATACA
Lee Fang develó información y datos de primera mano al confirmar que el gobierno interino de Jeanine Áñez contrató a CLS Strategies para las próximas elecciones de mayo en Bolivia, a las cuales Evo Morales no participará. Firmó un acuerdo con el fin de proveerse "asesoría estratégica en comunicaciones" y fabricar una ascendencia política en sus relaciones con el gobierno de los Estados Unidos.
La cadena de eventos que terminó con Áñez en el poder interino con miras a perpetuarse tras el cambio de régimen fue muy similar a lo sucedido en Honduras: golpe militar, posesión del ejecutivo por parte de partidos derechistas pro-estadounidenses, administración de los recursos del Estado para perseguir a la disidencia social, convocatoria de elecciones y candidatura del interinato en los comicios. Que la boliviana decidiera contratar a CLS no parece casualidad.
La firma de lobby estadounidense indica en el documento presentado por The Intercept que contactará a funcionarios del aparato federal, agencias gubernamentales, medios y asociaciones civiles en Estados Unidos en nombre de Áñez para construir un respaldo base a su candidatura. Todo ello con los dineros públicos del Estado Plurinacional de Bolivia, en beneficio de quienes usurpan ilegítimamente el poder.
A pesar de las críticas recibidas por candidatearse, siendo otro el objetivo del gobierno interino (convocar elecciones, sin más), Áñez no teme repetir la historia como tragedia y como farsa a la vez, parafraseando a Marx.
"En menos de un mes", dice Nahi Nascimiento, el interinato de Jeanine Añez en Bolivia salió de "mecanismos y bloques internacionales como UNASUR, ALBA". En paralelo, restableció "atropelladamente relaciones con Estados Unidos".bit.ly/2R9gVC8
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Por cierto, Juan Cortiñas está registrado como representante del gobierno interino de Bolivia, según The Intercept. Su experiencia con políticos derechistas de Colombia, Honduras y Venezuela dan a entender que se viene un blanqueamiento del terrorismo de Estado (remember las masacres de Senkata y Sacaba y el estado de sitio) y los cambios en política interna y exterior que Áñez dirige a discreción.
A esto habría que agregarle la guerra interna entre la otrora oposición por la presidencia (Carlos Mesa, Luis Fernando Camacho, la misma Áñez), mientras el Movimiento Al Socialismo (MAS) define sus líneas de acción ante las elecciones.
Cada vez se hace más nítido que son los intereses privados los que controlan los hilos del juego político en Bolivia en estos momentos, cuyos filamentos están íntimamente enlazados con los Estados Unidos. CLS Strategies mediante.
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