Para impulsar la acción desestabilizadora de la Carta Democrática Interamericana contra la República Bolivariana Venezuela, debe contar con la aprobación de 2/3 partes de 35 miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA) para su aplicación, así lo explicó este martes el abogado venezolano, Jesús Silva.
Durante el programa Mientras Tanto y por si Acaso transmitido por La Radio del Sur, Silva indicó que para que se active la moción todos los países pertenecientes al organismo deben debatir y luego votar a favor o en contra de la Carta Interamericana.
Con la votación aproximadamente de 23 países miembros de la OEA se activaría la propuesta injerencista contra la nación suramericana.”No será fácil que eso tenga éxito”, dijo Silva.
¿Cómo se aplica este mecanismo?
Este mecanismo se aplica en caso de que se produjera una ruptura del proceso político institucional democrático o del legítimo ejercicio del poder por un gobierno democráticamente electo, en cualquiera de los Estados miembros de la Organización (Art.20), tal y como fue el caso del golpe del 11 de abril de 2002 encabezado por Pedro Carmona, en donde se interrumpió abruptamente el orden constitucional venezolano mediante la implantación de una tiranía que duró escasamente cuarenta y siete horas.
Ante una alteración del orden constitucional, cualquier Estado miembro de la OEA o su Secretario General podrá solicitar la convocatoria del Consejo Permanente para analizar la situación y adoptar las decisiones (diplomáticas o de buenos oficios) que se estimen convenientes, a fin de promover la normalización de la situación alterada.
La única sanción que la Carta Democrática Interamericana prevé es la suspensión temporal del Estado miembro afectado hasta tanto no haya superado la situación que motivo su suspensión, por lo tanto la intervención extranjera, directa no esta prevista en ninguno de los contenidos de la Carta Democrática, ya que eso iría en contra de los principios de no intervención, soberanía e independencia de los Estados, fundamentos que rigen el espíritu de la Carta de la Organización de los Estados Americanos (Art.3).
El abogado venezolano aseguró que si se llega accionar la propuesta significaría la suspensión de Venezuela dentro de la OEA, “lo que supone un aislamiento diplomático, que pudiera enrarecer la situación del país con en el continente latinoamericano”.
“Esta acción traerá dificultades injustas para Venezuela como el bloqueo económico. Hay un bloque de países que se va a pronunciar a favor de Venezuela en la defensa de su integridad territorial y autonomía, al igual que será rechazada la propuesta, pero evidentemente puede ser una votación cerrada”, aseveró.
En ese sentido, el jurista venezolano señaló que esta acción representa un capítulo más de una conspiración que se viene agudizando desde que el presidente venezolano, Nicolás Maduro asumió la Presidencia de la República.
Afirmó que la propuesta agresiva del secretario de la OEA, Luis Almagro busca en aislar a Venezuela de los países de la región.
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