Por Eduardo Piñate R.
El mes de septiembre ha sido un mes de ofensiva de la Revolución Bolivariana y de nuestro pueblo liderado por nuestro hermano, el Presidente Obrero Nicolás Maduro. Durante este septiembre que se acerca a su fin, no sólo se preservó la paz y se derrotó el plan de agresión militar que se gestaba desde Colombia, con el auspicio de la oligarquía y el gobierno de ese país y la dirección de Washington, además, se logró el aislamiento del sector más extremista y fascista de la oposición política venezolana y de la élite supremacista que gobierna los EEUU encabezada por Donald Trump, cuando se abrió un nuevo espacio de diálogo entre el gobierno y la oposición que anunció sus primeros acuerdos parciales el 16 de septiembre y se inició la implementación de los mismos. Con eso se impuso la Política (con «P» mayúscula) y el debate democrático por sobre el plan de violencia y muerte de Trump y sus lacayos.
Si algo ha caracterizado al presidente Nicolás Maduro, es que se trata de un dirigente revolucionario que combina prudencia y audacia, firmeza de principios y flexibilidad táctica, junto a una gran capacidad de maniobra producto, todo eso, de un pensamiento profundamente anti dogmático, como buen hijo y discípulo del Comandante Chávez.
Esas características de su liderazgo fueron evidentes la semana pasada, cuando lanzó a los principales cuadros de la revolución en una ofensiva política y diplomática en tres frentes: Diosdado Cabello, con dirigentes del PSUV y del gobierno hacia la República Popular Democrática de Korea y a Vietnam, estableciendo acuerdos en diversas áreas; a la Vicepresidenta Ejecutiva Delcy Rodríguez y al Canciller Jorge Arreaza para el 74 período de sesiones de la Asamblea General de la ONU, en la cual libraron una batalla memorable, que se cerró con el brillante y valiente discurso de nuestra Vicepresidenta Ejecutiva; y el propio presidente Maduro, acompañado de un grupo de ministros de la economía, hacia la Federación de Rusia, para ampliar acuerdos y convenios en todas las áreas, como dijo el camarada presidente.
Septiembre cierra con el pueblo revolucionario, con la nación venezolana y el gobierno bolivariano con la iniciativa política y la ofensiva. Es un paso fundamental para consolidar la paz y la estabilidad política y para construir la prosperidad económica de la Patria. Seguimos venciendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario