Después de algunos días de paro patronal, las protestas se convirtieron en disturbios y una marcha antichavista fue desviada de su recorrido hacia el palacio de Miraflores a sabiendas que desde tempranas horas miles de simpatizantes afectos al Gobierno se encontraban reunidos alrededor de Miraflores en defensa a la Revolución Bolivariana.
A medida que avanzaba la marcha se tornaba cada vez más violenta. El plan golpista continuaba, en el centro de Caracas funcionarios de la Policía Metropolitana (PM) y francotiradores ubicados en las azoteas de los edificios generaban los muertos que justificarían el golpe.
Una vez ubicados en el centro de la ciudad, manifestantes de ambos lados fueron emboscados en lo que constituyó una verdadera masacre sin precedentes en la historia política de Venezuela.
Minutos después se transmitió un pronunciamiento pregrabado en el que miembros del alto mando militar, involucrados en el golpe de Estado, le pedían la renuncia al presidente Chávez.
Tras horas de tensa situación, el Comandante Chávez decide entregarse para evitar un derramamiento de sangre con el cual amenazaban las fuerzas golpistas, quienes luego mostraron una falsa renuncia del Jefe de Estado.
Con motivo a conmemorarse 12 años de este intento de derrocamiento, el pueblo revolucionario y chavista continúa en pie de lucha por resguardar el legado de nuestro Comandante Supremo, Hugo Chávez. Vamos juntos de la mano con el presidente Nicolás Maduro y todo el Gobierno Nacional impulsando desde nuestras trincheras su proyecto, la Revolución Bolivariana.
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