Representantes del Grupo Internacional de Contacto integrado por países miembros de la Unión Europea y Uruguay se reunieron este miércoles en Caracas con los viceministros venezolanos de Relaciones Exteriores para Europa y Asuntos Multilaterales del Ministerio del Poder Popular para Relaciones Exteriores, Yván Gil y Félix Plasencia, respectivamente.
Durante este importante encuentro, el segundo entre delegados del Grupo de Contacto y altos funcionarios del Estado, fueron exploradas las vías de cooperación técnica en el marco del sistema de Naciones Unidas y en estricto apego al derecho internacional.
El viceministro Yván Gil planteó, en este contexto, la necesidad de superar los aspectos relativos al bloqueo económico y financiero que ha impuesto el gobierno de Estados Unidos a la nación suramericana, que dificulta el acceso a las medicinas y alimentos para la población venezolana.
En este sentido, precisó que más de 50 mil millones de dólares han sido retenidos en el sistema financiero internacional, de los cuales más de 4 mil 500 millones en activos de rápida conversión se mantienen represados sólo en Europa. Al respecto, reiteró la petición del Ejecutivo nacional a los efectos de que estos recursos sean liberados para la compra inmediata de medicinas, bien sea a través de las estructuras técnicas que disponga la Unión Europea, bien a través de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Del mismo modo, ratificó la posición del gobierno del presidente Nicolás Maduro en el sentido de recibir todo tipo de colaboración en el ámbito de las Naciones Unidas y en el marco de la cooperación bilateral entre los países que integran el Grupo Internacional de Contacto y Venezuela.
El diplomático enfatizó que las medidas coercitivas unilaterales adoptadas por la administración de Donald Trump hacia el país latinoamericano vulneran los principios más elementales del derecho internacional y de la Carta de la ONU.
El viceministro Félix Plasencia, por su parte, lamentó la posición asumida por algunos países de la Unión Europea que convalida una situación contraria a la legislación y leyes venezolanas, surgida a partir de la autoproclamación del diputado a la Asamblea Nacional –en desacato- Juan Guaidó.
A finales de febrero pasado, el canciller de la República Bolivariana de Venezuela, Jorge Arreaza, recibió una delegación del Grupo Internacional de Contacto, establecido el pasado 7 de febrero en Uruguay, dando cumplimiento a las instrucciones del presidente Nicolás Maduro enfocadas en preservar la paz del país suramericano.
En esa ocasión, el ministro del Poder Popular para Relaciones Exteriores recalcó la necesidad de avanzar hacia el establecimiento de un mecanismo de diálogo nacional sin condicionamiento ni injerencias externas, que posibilite no sólo el entendimiento político entre las partes en controversia en Venezuela sino también la preservación de la paz y la recuperación económica de la nación.
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