El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, felicitó este miércoles a los integrantes de la Aviación Militar Bolivariana en su día, cuando tal día como hoy, pero en 1992, unidades de la entonces Fuerza Aérea Venezolana, en demostración de arrojo patriótico insurgieron contra el gobierno de Carlos Andrés Pérez y en repudio al programa de medidas que aplicó dicha Administración en materia cambiaria, comercial, de liberación de precios y privatización de empresa públicas.
A través de su cuenta en Twitter, el jefe del Estado venezolano señaló que la Aviación Militar Bolivariana seguirá resguardando el cielo patrio de cada intromisión imperial.
ANTECEDENTES
La entrega de atribuciones económicas soberanas de la Nación al Fondo Monetario Internacional (FMI) en 1989 ya había provocado el levantamiento del 4 de febrero de ese año. Este segundo alzamiento a su vez expresaba el profundo malestar incubado en el seno de las nuevas generaciones de oficiales por el rol de represores masivos contra el pueblo, que se había impuesto a las FAN el 27 y 28 de febrero de 1989. Así, el Pacto de Punto Fijo “…comenzó a ser cuestionado por su marcado control del poder (…) a raíz de los sucesos de noviembre de 1992, los dos principales actores del Pacto de Punto Fijo, AD y Copei, experimentaron dificultades institucionales” [http://www.venezuelatuya.com]
DELACIÓN
Como en otras conspiraciones cívico-militares de Venezuela -desde los días de la tentativa de Manuel Gual y José María España en 1797-, sería una delación ante las autoridades sobre la insurgencia que se preparaba en contra del gobierno de Pérez la que determinaría su fracaso, no obstante el alzamiento de unidades aéreas y la toma de instalaciones en Caracas y Aragua. Como efecto de la delación, el Alto Mando proclive a Pérez II, movilizó las unidades de la Infantería de Marina que debían trasladarse en un Hércules hasta la Base Aérea de La Carlota, de donde debían dirigirse a tomar el Palacio de Miraflores.
EL PLAN
De acuerdo a relato del comandante Wilmar Castro Soteldo, actual ministro de Agricultura y Tierras, el plan de maniobras quedó definido el día anterior, 26, en el teatro de la Comandancia de la Aviación, y consistía “…en tomar prisionero a un grupo de generales que iban a servir de rehenes para llevar adelante la toma del poder, que se suponía se iba a consumar con un grupo de infantes de Marina, el cual aterrizaría en el aeropuerto de La Carlota” [Correo del Orinoco, 25-11-2012]. A su vez los insurgentes preveían movilizar tropas de custodia de La Carlota, empero la delación frustró gran parte del plan, quedando desactivados componentes fundamentales para el cabal logro de sus objetivos.
LA CARLOTA
Los militares rebeldes con apoyo civil procedieron a la toma de la Base Aérea de La Carlota y la retención del Comandante de la Aviación, y el resto del Comando, aunque a poco se iniciarían combates con funcionarios de la Disip y cuerpos militares leales al gobierno de Pérez. Igualmente en los cielos de la Base se suscitó un combate aéreo entre naves insurrectas y F-16 manejados pro pilotos pro-gobierno, mucho mejor equipados que aquellos; saliendo con vida, no obstante, los aviadores alzados.
EN PALO NEGRO
El Comando de la Aviación insurrecta se estableció en la Base Aérea Libertador de Palo Negro (Edo. Aragua), con jefatura del general Francisco Visconti Osorio. Dicha posición se sostuvo por buena parte del día 27, empero al final, mas de un centenar de insurrectos emprendió la retirada en un avión Hércules, con rumbo al Perú en calidad de exiliados.
“EL SEGUNDO ALZAMIENTO MILITAR”
“Miren, les voy a contar algo, por allí hay un cuadro de cuando estábamos en Yare…hubo el segundo alzamiento militar del año ’92 con Luis Reyes Reyes, Wilmar Castro Soteldo, Francisco Visconti Osorio, Hernán Grüber Odremán, Luis Cabrera Aguirre, todos esos compatriotas, ustedes recuerdan…se fue al Perú; entonces estaban allá pasando trabajo, porque no tenían trabajo allá; la familia aquí no les pagaban sueldo…” [HUGO CHÁVEZ FRÍAS, Discursos, 2004, Caracas, Ediciones Presidencia de la República, 2005, Pág 420].
Correo del Orinoco
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