Inicia temporada de anidación y desove de tortugas marinas en Nueva Esparta

 Prensa Ecosocialismo y Aguas (Minea) / Nueva Esparta, 20.03.2017.- El pasado sábado se dio inicio oficial a la temporada de anidación y desove de tortugas marinas del año 2017 en el estado Nueva Esparta, tras el arribo del primer ejemplar a costas insulares. Se trató de una tortuga Cardón (Dermochelys coriaccea) que desovó en Playa El Agua, municipio Antolín del Campo, cuyos huevos fueron trasladados hasta el nidario instalado en el conocido balneario para su resguardo.

Posteriormente dos nuevos ejemplares de esta misma especie, que se encuentra en peligro crítico de extinción, arribaron en Playa Arenitas, en el Municipio Península de Macanao, ubicada dentro del Parque Nacional Laguna de la Restinga y Playa El Agua, en Antolín del Campo. En el mundo existen siete especies de tortugas marinas y todas se encuentran protegidas por estar consideradas en peligro de extinción, de las cuales tres están consideradas con la categoría “En peligro Crítico”.

En el año 2016 la temporada de tortugas marinas en Nueva Esparta permitió la atención de 137 nidos ubicados en playas Parguito, El Agua y el Humo de Antolín del Campo, además de Zaragoza, Puerto Cruz y Caribe en el municipio Gómez, y Playa Moreno (La Caracola) en Mariño. El programa logró la liberación de 5 mil 219 ejemplares de tortuguillos que alcanzaron el mar.

Es importante resaltar que de las siete especies de tortugas marinas que existen en el mundo, cinco utilizan las aguas insulares para navegación y alimentación, de las cuales, cuatro de ellas anidan en las diferentes playas de la entidad y del país. La dieta de estos especímenes está basada en medusas, corales, cangrejos, pequeños peces, así como algas, entre otros aspectos.

Las tortugas marinas tardan entre 20 y 30 años en alcanzar la edad adulta y durante su vida migran grandes distancias en busca de alimento y áreas para su reproducción. La principal amenaza que enfrentan los quelonios radica en el consumo y tráfico de especies, la pesca accidental al quedar atrapadas en las redes y morir ahogadas, destrucción del hábitat, enfermedades y el cambio climático. Cada ejemplar durante una temporada puede desovar en cuatro oportunidades, depositando entre 80 y 120 huevos en cada una.

Prensa Ecosocialismo y Aguas / Texto y Fotografías: Félix José Moya Ortiz